La Fundación Paz & Reconciliación (Pares) ha presentado su informe más reciente sobre la extorsión en Colombia, destacando este flagelo que ha experimentado un crecimiento constante y se ha convertido en una de las principales fuentes de ingresos para grupos armados ilegales en el país.
A pesar de los esfuerzos por parte de las autoridades, la incidencia de este delito ha aumentado significativamente en los últimos cinco años, tanto en áreas rurales como en las principales ciudades.
Según datos recopilados a través del Sistema de Información Estadístico, Delincuencial, Contravencional y Operativo de la Policía Nacional (SIEDCO), la investigación revela que en el año 2023 se registraron un total de 10,560 denuncias de extorsión en todo el país. Esto representa un incremento del 7,9% en comparación con el año 2022 y un aumento del 17,3% en relación con el año 2021.
En cuanto a las metodologías utilizadas, la llamada telefónica se destaca como el principal medio para llevar a cabo la extorsión, representando el 42,7% de los casos, seguido por los cobros directos (26%) y el uso de redes sociales (14,3%).