A pesar de las dificultades, las grabaciones fueron un espacio de colaboración y camaradería, lo que se reflejaba en la relación con Shakira, la estrella central de la producción. Henao, quien interpretó a una de las personajes más cercanas a la cantante en la novela, destacó el talento y la dedicación de la artista.
“Shakira no había tenido una formación como la nuestra, pero daba lo mejor de sí misma. Ensayaba, preguntaba, y se preparaba a fondo para sacar adelante cada escena”, comentó la actriz con admiración.
Para ella, trabajar junto a Shakira fue una oportunidad de aprender de alguien con un talento innato, capaz de superar cualquier obstáculo. “Es una persona con un tesón que lo que se proponga lo saca adelante. Una gran admiración, es que desde pequeña se veía lo grande que iba a ser”, dijo Henao, resaltando la disciplina de la cantante.
La química entre los miembros del elenco fue una de las claves para que El Oasis fuera un éxito. Aunque Shakira es conocida por su carrera en la música, en el set de grabación su actitud profesional y su capacidad para integrarse a los equipos fue digna de admiración.
Además, la experiencia compartida en la grabación fue también un espacio de diversión y conexión personal. Henao recordó cómo, entre escena y escena, compartían momentos de música.
“Shakira lleva una canción a donde quiera que va”, relató, evocando los momentos en que todos se reunían a cantar y tararear canciones entre tomas. “Cantábamos mucho Mecano… terminábamos tarareando entre todos”, recordó con nostalgia, destacando cómo la música unía al equipo en medio de la rutina.
El proceso de grabación de El Oasis no fue solo una experiencia de trabajo arduo, sino también un recuerdo de amistad, respeto y, por supuesto, de la magia de compartir momentos con una de las artistas más grandes del mundo.